viernes, 28 de septiembre de 2012

DE SUPERVIVIENTES DEL TITANIC, A RIVALES EN TENIS

RICHARD WILLIAMS Y KARL BEHR SALVARON SU VIDA DE LA TRAGEDIA DEL TITANIC
Ambos eran tenistas, y dos años mas tarde se encontraron dentro de las pistas para batirse en duelo.
La victoria de Richard Williams sobre Karl Behr por (6-2,6-2,7-5) en los Cuartos de Final del US Open no ha pasado a la historia como uno de los partidos de los mejores partidos, es mas, a bote pronto, esto no dice nada, pero detrás de estos protagonistas hay una historia de supervivencia en común, ya que los dos tenistas que se enfrentaron, salvaron su vida de la tragedia del Titanic en 1912.

Richard Williamas nació en la ciudad suiza de Ginebra, donde años antes se traslado su padre Charles para ejercer su profesión de Abogado.
Padre e hijo abordaron el Titanic en la ciudad francesa de Cherboroug, segunda parada del transoceánico, que antes había parado en Southampton, y que tenía por destino final, Nueva York.
Cuenta Williams que tanto su padre, como el, estuvieron a punto de perder ese barco, ya que pararon en París por equivocación.

Curiosamente, Karl Behr también tomó el Titanic en Cherboroug, y se sentó en un camarote cercano al de los Williams, aunque no se conocían.
Este empresario americano, que ya tenía un nombre en el mundo del Tenis, gracias a sus dos Finales en Dobles de Winbledom, estaba en Francia con el fin de convencer a los padres de su pareja de que era el candidato ideal para su hija, pese a la diferencia de edad (el 26 años y ella 19).

La noche del 14 de Abril de 1912, el apacible Crucero en el que viajaban alrededor de 2300 personas, se convirtió en una auténtica pesadilla.
Cerca de la medianoche, la tripulación divisó tarde un Iceberg, y no pudieron esquivarlo, produciendo en el Barco un daño irreparable.
Nadie imaginaba que tan lujosa mole de hierro que estaba surcando el Atlántico pudiera naufragar, pero Charles Williams, el padre del tenista, que ya había vivido esto otra vez, dijo que el Crucero se podría mantener a flote como mucho 15 horas, tiempo suficiente para un rescate.
Fue cuando comenzó la evacuación, con las mujeres y los niños en primer lugar, aunque Karl Behr, se coló en uno de los botes de salvavidas rodeado de mujeres.
Muchas fueron las criticas que recibió por tan cobarde actuación, de la que el se excusó diciendo que las mujeres le pidieron que fuera un hombre con ellas.
La situación de los Williams fue mas agónica, ya que tuvieron que salvar a un pasajero que había quedado atrapado en el Bar, y cuando ya iban a tirarse al Océano, una de las chimeneas se desprendió, matando a Charles, y mandando a Richard al agua, que quedó flotando en una barcaza de 30 personas, de las cuales murieron 19.

Tras cuatro días deambulando con rumbo perdido, al final ambos tenistas se conocieron, es mas, en sus memorias se echan flores el uno al otro.
Behr dice de Williams que era inmortal, ya que había salvado la vida sobre muchas inclemencias, y Williams dice de Behr, que se portó muy bien con el en la asistencia.

El 16 de Septiembre de ese mismo año, el Longwood Cricket de Boston fue testigo del primer enfrentamiento entre ambos tenistas, corría la cuarta ronda de ese Torneo de césped y Richard Williams se llevó la victoria sobre Behr en cinco apasionantes sets.
Como si de un tema tabú se tratará, ambos tenistas al menos volvieron a verse las caras tres veces mas en un corto plazo de tiempo.
Con el paso del tiempo Behr se fue alejando del mundo del tenis, y Williams, ya nacionalizado americano, llegó a ser el número 1 de Estados Unidos y el 4 del Mundo.
Ambos tenistas fueron incluidos en el Salón de la fama del Tenis en 1957, pese a que ambos no querían publicidad y evadían tratar el tema del Titanic, años mas tarde reconocieron que quedaron y se llamaron muchas veces para hablar de la tragedia que solo dejo 712 supervivientes.




LA TRAGEDIA DE HEYSEL

LA FINAL DE LA COPA DE EUROPA ENTRE JUVENTUS Y LIVERPOOL SE TIÑÓ DE LUTO
Una avalancha de aficionados en los prolegómenos del partido se llevó a 39 personas.

PROLEGÓMENOS 
El 29 de Mayo de 1985, el Estadio de Heysel en Bruseles se preparaba para vivir la fiesta continental mas grande a nivel de clubs en fútbol, tanto por la audiencia televisiva que dejaba este tipo de encuentros, como por la masa de aficionados que movía.
Además, una serie de alicientes hacía que el partido a mención que iban a disputar el Liverpool y la Juventus tuviera una tensión añadida.
Ambos equipos eran los mejores del mundo en ese momento, los ingleses llegaban a Bruselas como actuales Campeones de Europa, tras derrotar el año anterior a los también italianos de la AS Roma, y de las últimas ocho ediciones, se habían llevado cuatro.
Por su parte, la Juventus llegaba como vigente Campeón de la Recopa de Europa, con un plantel formado mayoritariamente por la selección italiana Campeona del Mundo en 1982, y con el mejor jugador del Mundo en ese momento, el francés Michel Platini, que venía de ser Campeón de Europa con Francia en 1984.

El último precedente entre ambos databa de diez meses antes, en la Supercopa de Europa , una Supercopa que se llevó la Juventus al vencer por (2-0) en Turín, y no disputarse el partido de Vuelta en Anfield Road al no encontrarse fechas.
Algo que provocó profundo malestar en el seno del Liverpool, que clamó venganza.
Se vaticinaba una Final de alto riesgo, ya que a todos estos alicientes, hay que sumar que el año anterior el Liverpool se llevó la Copa de Europa venciendo a la AS Roma, en Roma, y que muchos aficionados ingleses sufrieron brutales palizas por los "Tifosis" italianos, además había que tener en cuenta, que ese mismo año surgió el "hooliganismo" en Inglaterra, grupos neonazis y de extrema izquierda que consumían grandes cantidades de alcohol y para mas tarde producir actos vandálicos.

LA TRAGEDIA
El Estadio de Heysel estaba abarrotado por mas de 60.000 espectadores, 25.000 por cada bando, con los fondos de la portería, copados por gente de pie al no haber asientos.
La UEFA repartió a los aficionados de cada equipo para que no estuvieran juntos, y dejo entradas para los aficionados que quisieran asistir por cuenta propia.
El tan fatal suceso fue sobre las siete de la tarde, una hora antes del inicio del partido, en la Zona Z, una zona copada por aficionados de la Juventus, pero anexa a la X, donde había aficionados del Liverpool.

Los aficionados del Liverpool, en evidente estado de embriaguez, comenzaron a tirar objetos y a abalanzarse sobre los aficionados de la Juventus.
Fue cuando se produjo la avalancha, y los aficionados de la Juventus, intentando alejarse de los del Liverpool, se acumularon en la zona, quedando aprisionados por una parte contra el muro donde finalizaba la gradería, y por otro, contra la vallas que separaban el pie de campo.
Los hinchas de la Juventus quedaron aprisionados contra las vallas, que eran fijas y no tenían salida de emergencia ante la presión de miles de aficionados.

La situación encrespó a los aficionados situados en el resto del Estadio, impotentes desde sus localidades.
Aficionados de ambos equipos saltaron al campo armados con palos y otros objetos, y se dirigieron al palco de la afición rival con ánimo de agredirla.
Fue entonces cuando las fuerzas de seguridad tomaron posiciones, pero lo hicieron demasiado tarde, ya que la bomba había estallado.
Se produjeron muchas asfixias, crisis de ansiedad, y aplastamientos, muchos aficionados tuvieron que ser trasladados a pie de campo, y otros muchos necesitaron primeros auxilios.
Mas tarde llegaron las ambulancias, que poco pudieron hacer ante tan caótica situación.
Confirmaron la muerte de 39 personas por asfixia y aplastamiento, cuyos cadáveres fueron depositados en un espacio anexo al Estadio,visible al público que había en la grada.

Tal fue el impacto social que la televisión alemana dejo de emitir el evento, ya que se produjo una hora antes del comienzo, y las televisiones acreditadas ya estaban emitiendo.
Al contabilizar las 39 muertes, 34 eran seguidores de la Juventus, uno del Liverpool, dos belgas, y un francés, de los cuales 37 eran hombres, y dos mujeres, una de ellas, una niña de tan solo 11 años.

EL PARTIDO
Tras muchas negociaciones de la UEFA y los estamentos del evento, se decidió jugar el partido, ante el miedo de represalias de los aficionados si eso no ocurría.
El partido se jugó en un ambiente enrarecido, con los cadáveres visibles a los jugadores y al público asistente.
El partido poco trascendente dejó, solo el gol de Michel Platini de penalti en el minuto 57, un penalti provocado por el polaco Boniek, que fue fuera del área, que el colegiado suizo André Daina señaló dentro, y que dio la victoria a la Juventus por (1-0).
Nadie tuvo ganas de protestar la jugada, ni de hacer mención alguna a esta situación que resultó puntual.






EL DESASTRE AÉREO QUE CAMBIÓ EL FÚTBOL

VOLVÍA LA PLANTILLA DEL MANCHESTER UNITED DE DISPUTAR UN PARTIDO EUROPEO
Cuando al paso por el Aeropuerto de Múnich-Riem, el avión se estrelló.
Todo ocurrió un 6 de Febrero de 1958, el Manchester United con su plantilla al completo tomó el vuelo 609 de la compañía europea British Airways.
El equipo venía de Yugoslavia de disputar un partido correspondiente a la Vuelta de los Cuartos de Final de la Copa de Europa ante el Estrella Roja de Belgrado, el partido concluyó (3-3), y haciendo bueno el (2-1) de la Ida, los ingleses estaban en Semifinales, donde ya sabían que su rival iba a ser el AC Milán de Cesare Maldini y Grillo, pero nadie iba a dar crédito de lo que iba a suceder horas mas tarde.

En el Aeropuerto de Belgrado, el vuelo 609 que debía tomar la expedición del Manchester United se retrasó una hora, ya que el jugador Johnny Berry había perdido su pasaporte.
El avión tenía previsto hacer una parada técnica en Múnich, para cargar el depósito de combustible.

Corrían las 3 de la tarde cuando el Capitán del vuelo, James Thain, tras hacer la parada pertinente y llenar el depósito, se disponía a poner rumbo a la ciudad inglesa, fue intentar despegar cuando ocurrió todo, ya que se vio obligado ha desistir en sus dos primeros intentos de despegue por los múltiples problemas que sufrían los motores, y a las inclemencias meteorológicas.
Fue al tercer intento, cuando a las 3 y 4 minutos, el avión falló al ganar altura y se estrelló en unas tierras colindantes al Aeropuerto, en una casa despoblada.

Aunque las primeras investigaciones señalaban a James Thain como principal responsable del suceso, mas tarde se supo que el accidente fue causado por la formación de nieve al final de la pista, lo que causó una gran desaceleración al avión, impidiendo así que volviera a subir a una velocidad segura.
Pese a la resolución del caso, las Autoridades de Alemania Occidental, que eran las responsables del accidente, emprendieron acciones legales contra el Capitán Thain.
Además, el Gobierno alemán señaló a Thain como principal culpable, a pesar de que había pruebas y testigos que lo exculpaban.
Por alguna extraña razón, los testigos nunca fueron llamados a declarar por las autoridades germanas, y solo se emprendieron acciones legales contra el Capitán del vuelo, que tras muchos juicios, fue declarado inocente de toda culpa en 1968.

Tras esta tragedia que conmocionó al fútbol mundial, el Manchester United tuvo que ser recompuesto en torno a la figura emergente de Bobby Charlton, que sobrevivió a tan tremenda catástrofe.
En su primer partido tras el accidente, el Manchester United venció con solvencia al Sheffield Wednesday por (3-0), con un equipo plagado de reservas y con Jimmy Murphy como Entrenador.
Como dato curioso, las alineaciones de los "red devils" estuvieron un tiempo sin salir al no constar los nombres de los nuevos jugadores que formaban el plantel.

Fueron 21 las personas que perdieron la vida en ese vuelo, entre ellas los jugadores Duncan Edwards, una de las promesas del país, Roger Byrne, Tommy Taylor, o Liam Whelan, los directivos Walter Crickmer, el segundo Entrenador Tom Curry, los periodistas Alf Clarke, George Follows, Franck Swift, o el copiloto del vuelo, Kenneth Rayment.
De los supervivientes, destacan los nombres de Bobby Charlton, que años mas tarde se iba a convertir en el gran emblema de la historia de los "red devils", Harry Gregg, Ken Morgans, o Dennis Viollet, el Entrenador Matt Busby, el Capitán del vuelo James Thain, o la señora Miklos, que perdió a su marido en ese accidente.

Pese a tener que formar rápidamente el equipo lo mas competitivo posible, el Manchester no pudo lograr los éxitos de antes de la tragedia.
Aún así, consiguieron llegar a la Final de la FA Cup, donde cayeron ante el Bolton Wanderers por (2-0), y dieron la cara en su Semifinal de Copa de Europa ante el AC Milán.
Busby retornó al cargo como Entrenador a la temporada siguiente, y trató de construir un equipo al que denominaron "los busby babes", que de la mano de Bobby Charlton y la joven estrella, George Best, consiguieron una década después levantar la Copa de Europa venciendo al Benfica de Eusebio en la gran Final de Wembley por (4-1).